Cuando no organizas las cosas y crees que todo va a salir solo, pasa lo que pasa. Así fue el domingo pasado. Todos pensaban que iban a estar suficientes para jugar y nadie se preocupó. ¿Resultado? Fueron seis antes de empezar el partido.
Así comenzaron el partido nuestros jugadores, contra un equipo también mermado y con sólo un cambio. Aún así eran uno más.
El dominio, lejos de lo que debía ser por la superioridad del rival, estaba igualado. Ellos llegaban con cierto peligro, pero los gladiadores naranjas tiraban contras muy peligrosas entre Chucho y Ferry. Tanto era así que tuvieron 4 seguidas sin conseguir marcar gol. Jugadas milimetradas que quedaban desperdiciadas por la mala suerte.
Y la ley del fútbol hizo acto de presencia. Quien no marca, teniendo ocasiones, lo paga. En un despeje corto de Óscar, ellos se encontraron con un balón que consiguieron materializar en gol. El equipo se ponía con uno en contra y un jugador menos.
Pronto se notó la falta del séptimo hombre, pues en un fallo en la marca, el delantero rival se quedaba solo y hacía el segundo.
Justo entonces llegaba el refuerzo que tanto habíamos ansiado. El marcador estaba en contra, pero en el campo ya había igualdad. Así terminaba el primer tiempo.
Los atoperos comenzaban la segunda parte con el ego tocado y con la suficiente rabia contenida como para darle la vuelta a quien se pusiera por delante. Las jugadas seguían siendo de los dos equipos, pero los nuestros llevaban en la mente sólo una cosa: ganar.
El primer gol llegaba pronto, tras una gran jugada de Manu, Chucho y Ferry. Éste último tiró con mucha fuerza y el portero no pudo atajar el disparo, que aprovechó Chucho para meter el balón dentro de la portería. Si se hubiera puesto un jugador delante lo habría metido también.
El partido estaba muy interesante y las arremetidas naranjas eran continuas. Ellos llegaban pero la defensa les frenaba con contundencia. En una contra muy bien llevada por los nuestros, ellos se quedarían con 6. Era el momento de rematar.
Nuestra defensa se adelantaba y se sumaba al ataque en muchas ocasiones. En una de estas llegadas, Óscar hacía el empate a 2 y su primer gol con la camiseta naranja. Desde aquí, enhorabuena por el gol y por tan magnífico partido.
Los naranjas acusaban el cansancio, pero no se hacía notorio ya que las ganas de ganar el partido y la superioridad en el campo les daban oxígeno.
Una gran jugada de los tres de ataque, con pases magistrales, terminaba dentro de la red con gol de Manu.
El equipo se ponía por delante. Ellos tuvieron una ocasión más que no aprovecharon, nadie sabe por qué. La grada resoplaba aliviada.
Gran partido el de los nuestros y del rival también, que disputó todo el tiempo e hizo que toda la afición disfrutara. Gran partido, digo, de ambos equipos.
Desde aquí animamos al jugador contrario que salió lesionado del campo. Esperamos que la cosa no sea grave y que pronto vuelva a los terrenos de juego.
Saludos a todos.
(Entrada correspondiente al partido de la jornada 22 contra Pescados Cañete).
Así comenzaron el partido nuestros jugadores, contra un equipo también mermado y con sólo un cambio. Aún así eran uno más.
El dominio, lejos de lo que debía ser por la superioridad del rival, estaba igualado. Ellos llegaban con cierto peligro, pero los gladiadores naranjas tiraban contras muy peligrosas entre Chucho y Ferry. Tanto era así que tuvieron 4 seguidas sin conseguir marcar gol. Jugadas milimetradas que quedaban desperdiciadas por la mala suerte.
Y la ley del fútbol hizo acto de presencia. Quien no marca, teniendo ocasiones, lo paga. En un despeje corto de Óscar, ellos se encontraron con un balón que consiguieron materializar en gol. El equipo se ponía con uno en contra y un jugador menos.
Pronto se notó la falta del séptimo hombre, pues en un fallo en la marca, el delantero rival se quedaba solo y hacía el segundo.
Justo entonces llegaba el refuerzo que tanto habíamos ansiado. El marcador estaba en contra, pero en el campo ya había igualdad. Así terminaba el primer tiempo.
Los atoperos comenzaban la segunda parte con el ego tocado y con la suficiente rabia contenida como para darle la vuelta a quien se pusiera por delante. Las jugadas seguían siendo de los dos equipos, pero los nuestros llevaban en la mente sólo una cosa: ganar.
El primer gol llegaba pronto, tras una gran jugada de Manu, Chucho y Ferry. Éste último tiró con mucha fuerza y el portero no pudo atajar el disparo, que aprovechó Chucho para meter el balón dentro de la portería. Si se hubiera puesto un jugador delante lo habría metido también.
El partido estaba muy interesante y las arremetidas naranjas eran continuas. Ellos llegaban pero la defensa les frenaba con contundencia. En una contra muy bien llevada por los nuestros, ellos se quedarían con 6. Era el momento de rematar.
Nuestra defensa se adelantaba y se sumaba al ataque en muchas ocasiones. En una de estas llegadas, Óscar hacía el empate a 2 y su primer gol con la camiseta naranja. Desde aquí, enhorabuena por el gol y por tan magnífico partido.
Los naranjas acusaban el cansancio, pero no se hacía notorio ya que las ganas de ganar el partido y la superioridad en el campo les daban oxígeno.
Una gran jugada de los tres de ataque, con pases magistrales, terminaba dentro de la red con gol de Manu.
El equipo se ponía por delante. Ellos tuvieron una ocasión más que no aprovecharon, nadie sabe por qué. La grada resoplaba aliviada.
Gran partido el de los nuestros y del rival también, que disputó todo el tiempo e hizo que toda la afición disfrutara. Gran partido, digo, de ambos equipos.
Desde aquí animamos al jugador contrario que salió lesionado del campo. Esperamos que la cosa no sea grave y que pronto vuelva a los terrenos de juego.
Saludos a todos.
(Entrada correspondiente al partido de la jornada 22 contra Pescados Cañete).
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